Nieve...

La nieve nos ha alcanzado y, lo que para unos ha sido motivo de gozo, para otros se ha tornado en la peor de sus pesadillas (entre ellos los políticos que, por acusarse de algo, ya lo hacen hasta del tiempo). Y es que nunca nieva a gusto de todos. Hasta en la poesía se hace notar el debate, si no mirar la distinta vivencia que del mismo fenómeno tienen Gabriela Mistral y Miguel Hernández.

"Ha bajado la nieve, divina criatura,

el valle a conocer.

Ha bajado la nieve, mejor que las estrellas.

¡Mirémosla caer!"

Gabriela Mistral. Extracto de "Mientras Baja la Nieve"

"Nieve donde el caballo que impone sus pisadas

es una soledad de galopante luto.

Nieve de uñas cernidas, de garras derribadas,

de celeste maldad, de desprecio absoluto"

Miguel Hernández. Extracto de "El Soldado y la Nieve"

Quizás el que Miguel Hernández escribiese este poema en el frente de Teruel en el invierno de 1937 mientras, seguramente, Gabriela Mistral lo hacía tras una ventana al amor de la lumbre, nos dará una visión bastante aproximada del porqué de sus distintas apreciaciones.